Hace más de un año, el covid-19 viene azotando a gran parte del mundo. Este acaecimiento ha incidido fuertemente sobre diversos sectores de la población como el económico, educativo y laboral. Si hablamos del sector laboral, se sabe que el mercado es un espacio muy cambiante que ofrece y deshace empleos continuamente, pero nunca había sido tan endeble como ahora. A causa de la actual pandemia, muchas personas han perdido sus empleos y se han quedado varados en la nada. Para los jóvenes, ha suscitado la pérdida del apoyo directo a los ingresos y un gran impacto emocional.
1. El desempleo como problema social
El desempleo no es un problema que concierne solo a la gente sin trabajo, sino también a la razón social. Este fenómeno continúa siendo el centro de estudio de las ciencias sociales, donde se pretende enunciar cómo la ausencia de labor repercute sobre el individuo a nivel psicológico y, asimismo, sobre la economía y la sociedad.
Para la mayoría, conseguir un empleo simboliza la capacidad de poder sustentar sus necesidades, relacionarse con los demás y contribuir con el mantenimiento de los mismos.
De igual modo, genera efectos positivos como el reconocimiento, la utilidad y confianza intrapersonal.
2. Los jóvenes y el desempleo desde el punto de vista psicológico
El desempleo en los jóvenes no solo representa dificultades económicas, sino también el regreso a la dependencia paterna. Tener un empleo es una expectativa social y cultural aprendida desde la infancia, que es reforzada por agentes de socialización como la familia, escuela y los medios de comunicación; por lo tanto, cuando el individuo logra insertarse en el mundo laboral, accede a un nuevo estatus y a una nueva identidad social.
El no alcanzar este logro, origina un fuerte impacto en la vida personal. Un estudio meta – analítico determinó que la pérdida del empleo puede conllevar al deterioro en la salud mental. Además, se determinó que la población más joven es la más afectada.
Algunas de las consecuencias psicológicas derivadas del desempleo son:
- Mayores niveles de depresión o disforia.
- Pérdida de recursos psicosociales.
- Afectación sobre la autoestima de la persona.
- Disminución en la confianza.
3. ¿Cómo afrontar una situación de desempleo?
Investigaciones recientes destacan el apoyo social como vital para reducir los efectos negativos y estresantes del desempleo. Y si este apoyo proviene de los padres, tiene un mayor efecto mitigante sobre la población joven.
Asimismo, existen otras recomendaciones para afrontarlo, por ejemplo:
- Adoptar una actitud activa, preparar y enviar tu CV, hacer deporte, etc.
- Establecer una rutina diaria, con actividades claras.
- Aceptar la situación y evitar buscar culpables.
- Cultivar relaciones familiares y sociales saludables.
- Pedir ayuda psicológica (enfocada en el problema o las emociones)
¡Recuerda que todos los días son un buen día para un nuevo comienzo!
Equipo de FelizMente
Referencias
Broche-Pérez, Y.; Fernández-Castillo, E. y Reyes-Luzardo, D. A. (2020). Consecuencias psicológicas de la cuarentena y el aislamiento social durante la pandemia de COVID-19. Revista Cubana de Salud Pública, 46. https://www.scielosp.org/article/rcsp/2020.v46suppl1/e2488/es/#
Cabedo-Mas, A.; Arriaga-Sanz, C. y Moliner-Miravet, L. (2021). Uses and Perceptions of Music in Times of COVID-19: A Spanish Population Survey. Frontiers in Psychology, 11. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2020.606180
